viernes, 4 de noviembre de 2016

Me dejo ir sin miramientos o me quedo sumida en mis sufrimientos...

¿Cómo comenzar de nuevo?... Si la tormenta aún te pisa los talones. No pensé el sentirme tan cansada de ese dolor. Cada que que creo que ya terminó y por fin podré enfocarme en seguir, llega una fecha significativa más y la herida se abre de nuevo. Cada día duele en forma diferente y parece que duele más, no sé cómo sacar esto, no sé cómo sobrevivir a este dolor, que hay días que se siente tan intenso que ahoga y otros días tan lejano que siento que ya por fin pasó, y no.

He intentado aplicar la misma fórmula de sobrevivencia que aplique en la tormenta, pero no funciona, me busco metas y no emocionan en la misma forma que me sacó a flote el salvavidas Maratón cuatro, ni el superarme a mí misma me logra enfocar.

Ando tan voluble, un día estoy tan llena de endorfinas que me quiero comer el mundo y otro tan apagada que me quiero ir al inframundo...

En la semana BBtuti me dijo algo que me caló hasta los huesos. Me dijo que he cambiado tanto, que antes era tan voluntariosa (algo que me hacía sentirme orgullosamente feliz), eso me tiene en un dilema por aventarme al precipicio con ojos cerrados, como en muchas ocasiones atrás lo he hecho y me salen las cosas tan bien, aunque después estoy que muero de miedo, pero ese mismo miedo es el que me da fortaleza a seguir.

No sé, si quizá el aventarme al precipicio del Maratón Lala me sirva en esta ocasión. 

Me dejó ir sin miramientos o me quedo sumida en mis sufrimientos...

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