jueves, 13 de noviembre de 2014

Lo que descubrí y vi en noviembre mientras me preparo rumbo al reto.

Y noviembre llego con todas sus sorpresas y sin planearlo el día primero me desperté muy temprano y recordé los bonitos amaneceres que se dan en el lugar al que vamos, así que me levanté a esperar la llegada del sol.

Entre las sorpresas de este nuevo mes es que no voy mejor, pero tampoco empeoro, a decir verdad es que estoy estancada, al menos así me siento, y así será hasta que por fin el cuerpo tenga un gran y verdadero reposo de cero corrida en un mínimo de tres meses, sin embargo continuo corriendo, a paso muy lento, pero lo sigo haciendo y eso hay que agradecerlo y así lo hice. Este peculiar inicio de mes me dio otra perspectiva de cara al reto.

Noviembre comenzó en unas cortas vacaciones de fin de semana, nos fuimos a Cuernavaca desde el viernes, mi idea era correr en la demandante altimetría de la ciudad, y gracias a mi acelere de la semana al hacer fuerza de más y que se resintiera de nuevo la rodilla, no tuve la oportunidad de hacer el trote deseado, así que me limite a descansar y repetir las ásanas que he aprendido y me hacen sentir tan bien, obvio me metí a la alberca  a nadar y haciendo un poco de trote acuático y ejercicios de fuerza bajo el agua y claro asolearme mucho. Que qué descubrí y vi al menos en este fin? Pues que me puedo relajar y a la vez ejercitar y sin la necesidad imperante de  maltratar el cuerpo, eso de dominar la ansiedad me sigue siendo un reto increíble, cada vez que pienso que ya la domino más, solita me desmiento.

El Tepozteco
Flores hermosas entre el cielo azul
Ya huele a Navidad en Cuernavaca y de fondo el Tepozteco
Aparte del hermoso amanecer que descubrí, también me percaté de que no soy tan flexible como creía, esto lo pude ver después que mi hermano me compartiera unas fotos que me tomó mientras yo practicaba lo recién aprendido de yoga. Y... ¡oh sorpresa, me veo bastante bolita!

Descubrí que me hace sentir muy bien el estirar, bueno, propiamente no es un descubrimiento, ya sabía que disfruto las elongaciones, en lo físico, pero en el alma, por llamarlo de alguna manera, me hace sentir muy tranquila, y quise extender la sensación, así que me di a la tarea de buscar en dónde tomar más yoga cerca de casa y en realidad hay muy poco, así que en la red encontré unos vídeos para principiantes de yoga, y los he estado haciendo, al menos 2 veces por semana, estoy en el reto de tratar de aplicarlos 3 veces por semana o diario o uno en la mañana y otro en la tarde, así para ir perfeccionando y dándole alivio al cuerpo.

Por lo pronto comencé con este vídeo y combinándolo con lo que aprendí en las clases de yoga que nos dio la instructora de innovasport.


Puede parecer hasta aburrido, lo digo porque esa era mi percepción, si no sudaba o me sentía agitada, sentía que no hacía nada, pero si de eso se trata, se requerirá cada vez algo más extremo, el correr te da mucha condición y es como una droga, que quieres cada vez más y más intensidad, reto y complejidad y así vas creciendo, pero a veces el cuerpo no puede seguir el paso de la mente y es en ese momento en donde uno tiene que encontrar el equilibrio. Para mí, en este momento siento que es este, me da la sensación de tranquilidad que requiere mi cuerpo en lo que sana y se recarga para el tremendo maltrato que en un mes le voy a dar.

Y así transcurrió la primer semana de noviembre entre yoga y una relajada corrida de 12k en mi pistita, y mi rodilla se relajó bastante, me sentí más fuerte, llegó el segundo fin de semana del mes, y la cita y distancia prometida era de 25 kilómetros, sabía que podía, que me cansaría y que terminaría, pero, sí, ya me tienen harta los "peros" estamos en mudanza y el sábado anduvimos atareados y trabajosos, seguramente hice un mal movimiento o se le cargo demasiada fuerza al mover un mueble y el domingo amaneció rara mi rodilla, aún así decidí irme a cumplirla, nuevamente a probar el outfit, por cierto, terminamos el sábado de "arreglar" después de las 12 de la noche y nos dormimos súper tarde, así que como es de suponerse nos levantamos tardísimo, comenzamos a correr por ahí de las 12 o una de la tarde.

Se había sentido muy buen clima e imaginaba que estaría excelente al día siguiente, y cuál va siendo la sorpresa que casi medio día y estaba nublado y con aire frío, no desistí en el intento y comencé a prepararme, el BB anda malito y con ese clima me preocupó que fuera a recaer, así que le dije que se quedará pero se abrigó bien y decidió acompañarme, desayunamos bien, me preparé con mi barrita para el inter del entreno, ya sé que me da hambre y me pongo mal, y nos fuimos al viejo conocido Bosque de Aragón.

Y así, con todo y la rodilla sintiéndose rara comenzamos el entreno, de nuevo se descargo el celular, no guardó por completo la app la ruta, solo hasta el kilómetro siete y pico, Había decidido que entrenaría sin música, para irme entrenando y desacostumbrarme a ella, pues el Maratón quiero correrlo sin ella. La verdad que sí sentía miedo del dolor, por lo mismo mi paso fue más lento todavía del que he venido haciendo, nos llevó más de 30 minutos extras del programa terminar el entreno, bueno de hecho no completé los 25, no porque no quisiera o pudiera, el BB ya se sentía mal, así que con mucho trabajo lo hice llegar al kilómetro 20 y pico, lo dejé comprando jugo y yo me seguí hasta el 23, lo esperé y caminamos casi dos kilómetros más, me llevo jugo de naranja con miel que me vino muy bien, pues ya me sentía muy cansada, encontramos un prado muy lindo y decidí estirar ahí, en esta ocasión no estiré como siempre, decidí aplicar la rutina del vídeo, me ayudó mucho a relajar, independientemente que por el paso que hice no hay gran exigencia, pero trotar por más de tres horas tiene parte de cansancio y los músculos se tensan, terminando esos últimos casi tres kilómetros sentí un dolor muy intenso en el cuerpo, tenía muchas ganas de llorar por la desesperación, y poco a poco se fue calmando y ahora a comer, que después de este entreno bien que hacía falta.

Por cierto, aún sigo aplicando el Método Osler, viendo los tiempos que he hecho, honestamente dudo que se pueda mejorar los tiempos como vi en el artículo que me vendió la idea, que en esta ocasión no es importante ese tema, sin embargo, siempre hay esa idea de superarse a uno mismo ¿qué no?, de cualquier forma seguimos en pie de lucha, sin desistir y manteniendo el ánimo y enfoque ¡como jijos no!

No hay comentarios:

Publicar un comentario